Una nueva versión para “Desierto Florido”, una emotiva y emocionante canción de Nicole, es la excusa perfecta para una colaboración discográfica muy esperada al lado de Ana Torroja. La canción vio la luz hace algunas semanas, y LBE sostuvo una plática con la artista chilena. Producida por Pablo Stipicic, Fernando Herrera y Nicole, “Desierto Florido” ya es un éxito en las plataformas digitales.
¿Cómo se dio esta colaboración, Nicole?
Ha sido muy emocionante, porque las canciones del pop español de Ana con Mecano me acompañaron desde mi adolescencia, su intepretación tan profunda en cada palabra y en cada canción siempre me llegó, su importancia de emocionarse con cada canción es una gran referencia. Luego la conocí y conectamos mucho, nos presentaron y yo muy emocionada por supuesto. En 2016 ella fue parte de La Voz Chile y ambos fuimos coach; es muy loco que uno cuando niño cree que va a conectar con todo el mundo y luego te das cuenta que eso pasa con cierta gente y se logra un cercanía muy importante y eso me ha pasado con Ana Torroja hasta el día de hoy, hay confianza y fue muy lindo que ella escuchara “Desierto Florido” y que aceptara cantarla conmigo.

¿Grabaron juntas o por separado?
Ella grabó de forma remota en un estudio en México, en los Estudios Noviembre, donde grabamos un video juntas. Así deben ser las colaboraciones, de manera genuina, son los mejores match en una industria que está ávida de sacar y sacar cosas, es bueno tomarse el tiempo para sacar una obra, por algo somos old school. La nueva generación de la música urbana nos mostró eso, de la importancia de las colaboraciones.
¿Cuál es tu canción favorita de Mecano o Ana?
Me encantaba despertarme en las mañanas con “Ay, qué pesado”. Para mí tiene un valor muy grande su trabajo, ella ha sido tan consecuente con sus emociones y sus tiempos y con valorar la intensidad de la vida para poder contar historias, no sacar discos por cumplir o por las exigencias de la industria, sino procesar un tema interno y luego sacar canciones.
Y la canción cobró nueva vida…
Tien nueva vida, con sus armonías y sensibilidad. Cuando me mandó la primera grabación me emocionó mucho. Yo comparía mucho su música con mi madre y ella ya no está, por lo que igual hay un sentimiento extra emocional porque sé que mi madre donde esté estará muy contenta también.
¿Cómo fue trabajar con Gustavo Cerati y otros músicos en una época muy distinta a ésta?
Ha sido muy bonito el poder trabajar con maestros como Gustavo Cerati, o como Tito Dávila, en un disco que celebra 30 años. Él era tecladista de Enanitos Verdes. Y Gustavo cantó varias canciones y tocó la guitarra en varias de las canciones de ese disco que el produjo que se llamó “Sueños en tránsito”. Él entendió lo que yo quería, escuchábamos mucha música electrónica, Massive Attack, Orbital, y quería juntar las guitarras acústicas con la electrónica como Gustavo lo hizo en “Amor Amarillo”; era un gran productor, pero de todos he aprendido mucho.
¿Actualmente además de celebrar aniversario y este sencillo, viene un nuevo disco?
Estoy en casa justamente, con mi hijo que es baterista. En esta casa gusta mucha la música; estoy creando nuevas canciones y espero poder publicar un nuevo disco y seguir viajando a México y Estados Unidos. Hice una colaboración con una banda indie mexicana muy interesante que se llama Boca Paila, y es parte de lo que yo quería hacer en estos viajes: nutrirme de gente talentosa, escribir de cero, eso siempre me ayuda para crear y bueno, estoy celebrando “Esperando Nada”, 30 años de que decidí a los 17 años dedicarme a hacer música.