Mucha gente trata de parecer misteriosa y especial. Lourdes Hernández AKA Russian Red simplemente lo es. Su single Intelectual sexual, un medio tiempo de pop atemporal, es su más reciente lanzamiento junto a un clip que ella misma co-dirigió. Platicamos con la cantante española radicada en L.A.
¿Dónde andas?
Ando girando en España, estoy en Madrid ahora mismo.
La anterior vez que platiqué contigo, estabas viviendo en Estados Unidos…
Sí, llevo 10 años viviendo en Los Ángeles, pero ahora estoy entre España y Estados Unidos.
Pasaron varios años para que lanzaras nuevas canciones, ¿por qué?
Para mí este fue un regreso muy esperado, pero por así decirlo estaba esperando que se alinearan los astros. Mi trabajo siempre tiene que ver con la experiencia personal y para eso no siempre hay chance de generar algo, yo respeto mucho el sentido de la ausencia, le da validez al material. Y entonces, sabes, estoy feliz de reencontrarme contigo y con la audiencia.
¿Estabas desencantada de la música?
Eso está un poco tergiversado, yo no me enamoro de la música, me enamoro de las personas, de la vida y de mí misma. Yo no me considero música, no soy una virtuosa, para mi el music making es una consecuencia, una herramienta para canalizar esas emociones.
¿Pero sí hubo una crisis?
Parte de la crisis que tuve es porque mi vida no empieza ni acaba con la música, tiene muchas vertientes de mí misma. En ese tiempo, me dediqué a vivir mi vida y esperé que llegara un momento que valiera la pena contar algo con la música.
El disco gira justo sobre las asuencias y en volverse a enamorar, sobre las redes sociales…
El disco sí tiene un concepto, el de volverse a enamorar, el deseo, una ridiculización con cariño de todo lo que pasa alrededor, de forma sincera. Tiene un toque de sentido del humor que yo no tenía antes.
Sí, en la intelectual sexual por ejemplo, se nota la ironía…
Tiene que ver con hablar de mi media naranja, calificandolo de cosas que suelen ser contradictorias, por que lo intelectual no tiene mucho que ver con lo visceral, sino con la mente. y lo sexual es puro instinto. Para mí esa canción habla de que al final mucho del enamoramiento tiene que ver con puro espejismo…
Hay personas que se enamoran de la inteligencia de alguien…
Claro, una cosa es que te sientas seducida por la inteligencia de alguien y otra cosa es que siendo una persona pensante te dejes ir por sus instintos sexuales. En la canción traje al mismo sitio la contradicción entre lo sexual y lo intelectual…
Tus letras no son tan obvias.
Al final trato que sean poéticas, descaradas pero poéticas. Para mí las canciones están habitadas por un personaje fundamental, la clown sexy, la ridícula obsesionada con el enamoramiento como motor vital, y eso es bonito pero es ridículo. Ese tipo de personaje me resulta encantador y he tratado de retratar y de buscarlo hasta en mis conciertos, se vale ser consciente del drama y reírse de eso.
En una de las canciones hablas de que buscas en las redes sociales el avatar de alguien que conociste en un concierto…
Sí, es sarcasmo, tiene que ver con que buscas a alguien que está viendo tus stories de Instagram. Eso todos lo hemos hecho, ver a quién le hemos llamado la atención. Pues no sé, yo soy muy de profundizar en todo, como no soy una persona superficial me interesa la frivolidad porque en realidad guarda mucha profundidad.
Trabajaste con Luis Sansó “Luichi Boy” (guitarrista de Cupido) y Carlos René (conocido por su trabajo como productory por formar parte alguna vez de Axolotes Mexicanos) ¿cómo fue el proceso?
Las guitarras de Luis son super creativas, cada quien partió desde sus terrenos, pero yo busqué una unidad sonora que a mí me parece que habla del momento del enamoramiento, de lo romántico, de lo profundo, de lo superficial. En el proceso, yo iba decidiendo que funcionaba y que debía ir buscando.
El resultado fue sorpresivo o estaba dentro de lo presupuestado, ¿qué tanto espacio hubo para la sorpresa?
No me senté a hacer un disco, me lo fui encontrando. Siempre supimos que teníamos entre manos ese sonido, pero no lo estabamos buscando.
¿Crees que el reggaeton sea la nueva música pop como muchos aseguran?
La música urbana se ha cotizado bastante, y se han creado puentes entre los estilos musicales que tienen que ver con esta era digital. El pop, más allá de la música es algo que es sencillo y efectista, y que es memorable y reconocible, eso es pop, en la música, en el arte, en el cine, hay muchas formas de contar paisajes, el pop es iconografía. En ese sentido, pues tiene que ver con los años 50 con Phil Spector y que ha ido cambiando, siento que hay mucho de ese tipo de producciones, pero modernizadas.
Vives entre L.A y Madrid, ¿qué lugares recomiendas conocer en Los Ángeles…
Mi vida en L.A.es otra cosa, soy diseñadora de interiores, me encanta y como mi pareja es arquitecto, pues lo hacemos juntos, Estar en L.A. me permite tener un personaje más allá. Mi vida gira en torno a eso, las pocas veces que salgo, me gusta ir a un club que antes estaba en Nueva York y que luego se mudó a Los Ángeles, no recuerdo el nombre, y que tiene una programación muy buena.
¿Alguna vez has sido DJ?
Sí, de vez en cuando hago algunas cosas y tengo mis sesiones ya hechas. Me encantaría hacer algo con La Banda Elástica.
¿Podrías recomendarnos algunas películas?
Harold and Maude y A Woman under the influence.
