Esta semana, les presentamos “El mundo sigue igual”, primer sencillo de lo que será el primer larga duración deLucas Trotacielos, un grupo formado en el D.F. que parte del shoegaze, el grunge, el garage y el noise para hacer canciones que invitan a la introspección.
Como toda banda independiente, su música es resultado de un gran trabajo y dedicación, algo que sus fans no dudan en reconocer. Al menos, eso quedó claro cuando decidieron fondear su nuevo disco para buscar el apoyo financiero para grabar el material con la mayor calidad posible. Platicamos con Laura Llamas, voz y guitarra de la banda, que se encontraba en Los Ángeles para celebrar las fiestas de fin de año. Esto es lo que platicó para La Banda Elástica.
¿Cuándo te diste cuanta que querías dedicarte a la música?
Yo tocaba el piano desde los 8 años, siempre me gusto la música, iba a clases de canto. Pero fue en la prepa cuando comencé a ir a shows en Los Ángeles y con mis amigas decidimos comprar instrumentos sin saber tocar nada. Yo me compré un bajo y comenzamos sonando horrible (risas), tenía 17 años y desde entonces ya no pude dejar de tocar.
¿En esas primeras bandas tú ya eras cantante, hacías letras en inglés?
Yo cantaba varias rolas, pero luego nos turnábamos con otra chica, y sí, siempre fue en inglés.
¿Cuándo decidise cantar en español?
Cuando llegué a México quise cantar en español, sabía que estando [en México] en inglés no funciona mucho, de hecho, en Lucas sólo tenemos una canción en inglés, el resto son en español.
¿Por qué te mudaste de L.A. a la ciudad de México, fue por la música?
Yo vivía en L.A. y por cuestiones del destino me tuve que ir al DF. Tuve algunas bandas en L.A., así que llegando a México me entró el gusanito de volver a tocar. Conocí a Yayo Escamilla que toca la guitarra, nos juntamos a escribir y cuando teníamos 5 rolas comenzamos a buscar músicos. En una fiesta de las que organizaban Los Románticos de Zacatecas, conocimos a Alfonso Dorantes, el primer bajista y a Daniel Badillo, que toca la batería. Así comenzó la banda, grabamos el primer E.P. e hicimos varias tocadas.
Ahora terminaron su primer L.P., ¿cómo cambió el proceso entre su anterior material y la nueva producción?
El primer E.P. lo grabamos todo en un día porque no teníamos dinero para más tiempo de estudio, no tuvimos tiempo de digerir las rolas, fue súper exprés. El segundo lo grabamos en tres días. Para este nuevo álbum, que es el primero de larga duración, nos dimos a la tarea de buscar estudios que tuvieran características para el sonido que buscábamos. Nos fuimos a grabar a León (Guanajuato), a un estudio muy padre, tienen de todo, el espacio está increíble. Estuvimos tres días y grabamos todos juntos, lo cual es diferente.
Leí que decidieron meter el proyecto a Fondeadora, que es una plataforma para generar recursos, ¿cómo fue su experiencia?
Tenemos varios amigos que nos comentaron que Fondeadora era muy buena opición. No habíamos escuchado pero investigando nos pareció muy buena idea porque de las tocadas no iba a salir el presupuesto. Así que decidimos meter el proyecto del nuevos disco y rebasamos la meta, que era de 50 mil pesos.
¿Cómo es el mecanismo para generar los ingresos?
Al principio creímos que era sólo postearlo en las redes sociales, pero no, en realidad en un trabajo muy laborioso, tienes que explicarle a toda la gente que conoces, tu familia y sobre todo a tus fans, uno por uno, de qué se trata el fondear tu disco. De lo contrario si no llegas a la meta no ganas nada del dinero. Pero salió muy bien, porque si llegas a la meta que tú mismo fijas, la ganancia de Fondeadora es del 5% y el resto es para la banda. Es un proceso muy rápido, firmas papeles, todo electrónico y en una semana te depositan el presupuesto. Sin eso, no sé en cuánto tiempo hubiéramos tenido dinero para hacer un disco en forma. Ahora tuvimos para pagar estudio, master, arte, maquila, etc… aunque, ¿sabes qué? Hasta eso nos fue insuficiente (risas) es desesperante a veces, pero ni modo, así es la música.
Platícame cómo concibieron el disco, ¿son una banda democrática a la hora de componer?
Ha habido etapas, en ocasiones algunos tenemos que trabajar mucho y eso complica bastante las cosas para componer. Ahora en este disco el proceso fue más democrático, hubo canciones del bajista, del guitarrista y hubo muchos acuerdos entre nosotros. Siempre hay alguien que viene con más ideas, pero este disco que viene en febrero es el primero que fue compuesto entre toda la banda.
¿Cómo se llamará el disco?
Acordamos en que todavía no revelaríamos el nombre (ríe). ¿Está bien?
A mí se me hace que tiene qué ver con Star Wars, por eso no quieren decir nada…
(Ríe) No le ha visto aún.
¿Pero como de la peli surge el nombre de la banda… no?
Ya sé, vamos a ser los últimos (risas). Sí, todo surgió en una fiesta, entre bromas. No sabíamos cómo ponerle a la banda y un amigo dijo “¿por qué no le llaman Lucas Trotacielos?” Nos dio mucha risa y al siguiente día nos acordamos del chiste pero ya sobrios nos dimos cuenta que sonaba muy bien (ríe).
¿Quién es el más fan?
El baterista es el más fan, él si se sabe los nombres de todos los personajes y hasta colecciona figuras de la película.
Retomando el tema del disco, me decías que lo grabaron en León, Guanajuato, ¿cómo decidieron que grabarían todos los instrumentos al mismo tiempo?
El disco lo hicimos con Cave, el dueño del estudio, muchas bandas han grabado ahí. Es un buen lugar porque tiene un depa, entonces terminas de grabar a la hora que quieras, descansas un rato, despiertas y sigues trabajando, se da otra dinámica. Sobre grabar juntos, lo decidimos nosotros desde antes y por lo mismo nos fuimos súper ensayados, le dimos durante meses, todos los días, muchas horas para estar al tiro. Es una gran diferencia grabar todos juntos, todo cambia, se siente con más fuerza la grabación porque al estar todos tocando se genera un sentimiento más fuerte en las canciones. Las tocas como las tocarías en vivo, con la energía de todos.
Es muy difícil grabar todos juntos, ¿cómo te sentiste?
No te pones tan nervioso, estás más relajado porque el ver a tus compañeros de da confianza, todo fluye más.
¿Las voces también las grabaste en vivo?
La voz sí fue grabada por separado, la grabamos en otro estudio, con más tiempo para experimentar.
¿Cómo visualizan el disco, como un álbum conceptual o una colección de canciones?
Más que un concepto global, nos clavamos en que cada canción tuviera un feeling muy diferente y que cada una tuviera un sonido especial. Quisimos que cada canción nos llenara casi al 100%, obviamente es imposible que a todos les guste al 100% todo de una canción, pero cuidamos mucho que todos estuviéramos lo más satisfechos posibles con la vibra de cada canción, fue un proceso de casi un año.
Lanzaron un primer sencillo, ¿cuántas canciones tendrá todo el álbum?
Son 12 canciones, ahorita sacamos el sencillo de “El mundo sigue igual” para que la gente supiera que estábamos terminando el disco.
¿Ya tienen fecha de salida?
Lo más seguro es que salga a principios de abril, ya sabes que se van atrasando cosas del disco.
Ustedes han sido asociados mucho a los 90, una década en la que explotó el grunge. Yo crecí también en esa década y ahora me sorprende saber que las nuevas generaciones no simpatizan tanto con ese sonido, ¿qué bandas les pondrías para contagiarlos un poco?
¿En serio? A mí me encanta (ríe)!!. Les pondría algo de shoegaze, un movimiento que surgió en los 90, hay bandas increíbles que tienen un sonido muy reconocible, por ejemplo My Bloody Valentine, Slowdive, The Jesus And Mary Chain. Los 90 no todo es grunge, también estuvo muy presente Sonic Youth, que ha influenciado mucho lo nuestro.
El shoegaze no fue muy grande en los 90, era un género de minorías, pero de repente ahora goza de un revival tremendo, ¿a qué crees que se deba esto?
Ahora todos estamos en búsqueda de un nuevo sonido, pero también las cosas se reciclan, por ejemplo, The Strokes tienen mucho de los Ramones. Es normal ir al pasado para ver qué estaba chido para tratar de capturarlo en el presente. El shoegaze fue una escena poco explotada y ahora con este revival tiene una oportunidad de surgir con más fuerza. Es un género con un feeling underground, lo cual es algo que todo mundo disfruta.
En los 90, la única banda latina que peló al shoegaze y lo incorporó para hacer algo en español fue Soda Stéreo con Dynamo, un disco alucinante y muy avanzado para su época, ¿tú escuchaste algo en español que te influenciara para hacer lo tuyo?
A mí el disco que me cautivó fue Amor Amarillo de Cerati, nunca había escuchado algo así en español. No tenía la onda Caifanes o Café Tacvba, tenía un sonido totalmente diferente. Fue de esos discos que te trauman y lo escuchas en todos lados, en tu cuarto, tu coche, donde sea.
¿Qué bandas o discos escuchan juntos ustedes cómo banda, cuando salen de gira sin que nadie quiera cambiarle?
Coincidimos mucho. Nuestro baterista tiene un gusto más ecléctico y generalmente le decimos que ponga su iPhone para conocer otras cosas. Pero 5 discos que siempre podemos escuchar sería el 23 de Blonde Redhead, algunos de Slowdive, Silversun Pickups, algo de Beach House o de Tame Impala. Esas bandas las podemos escuchar bastante y nadie le cambiará de música (ríe).
¿Qué te pareció Depression Cherry, el último de Beach House?
Sí me gustó, me pareció un poco de lo mismo, pero aún así me gustó, soy muy fan la verdad. ¿Los viste cuando fueron al DF?
Sí, son geniales en vivo, igual Blonde Redhead…
Sí, de hecho a ellos los conocimos, nos quedamos al final del show y de repente salieron del escenario y comenzaron a platicar, éramos como 10 personas, entonces aprovechamos para tomarnos la foto.
Van a despedir el disco anterior con una presentación especial en Casa del Lago en la ciudad de México, ¿qué sorpresas nos esperan?
Sí, es una tocada que haremos en la Casa del Lago para despedir el disco de Blanco y negro, un E.P. que nos llevó a tocar por muchos lugares. Le llegamos a más gente y nos abrió muchas puertas. También tocaremos algunas canciones nuevas. Tendremos 5 invitados de diferentes bandas, todos amigos, pero hasta el momento se sabrá quiénes son. La presentación será el sábado 16 de enero, ojalá puedas ir.
Claro, por allá nos vemos Laura, gracias por la entrevista.
¡Gracias a ti, feliz año!
