Con más de 25 años de carrera, Aterciopelados es todo un referente de la música alternativa latinoamericana. Mucho antes que la cumbia se pusiera de moda, Andrea Echeverri y Héctor Buitrago, decidieron hacer un híbrido entre el rock y los ritmos de raíz de Colombia.
Este año, en medio de su gira Reluciente & Rechinante, la banda recibió una invitación para encabezar Día de los Muertos: The Legacy Of Posada, el próximo sábado 28 de octubre, en el Hollywood Forever Cemetery.
Esta edición, está dedicada a José Guadalupe Posada (1851-1913), ilustrador mexicano reconocido por sus “calaveras” de sátira política y humor negro, enarbola la edición 18 de esta celebración. Platicamos con Andrea, quien una noche antes se presentó en Chihuahua (MX).
A ustedes les tocó abrir la escena en Colombia. En la década de los 90, no existía una industria alternativa, la tuvieron que inventar. Sin embargo, lo hicieron con un discurso muy claro, de conciencia política, social, ecológica y una fusión musical con ritmos de raíz. ¿Cómo llegaron a ese discurso?
Para empezar, nos tocó una época en que todo era un poco más conceptual. Ahora la escena está dominada por el reggaetón, eso por un lado. Por otra parte, nosotros comenzamos ya grandes, yo ya había estudiado la carrera de arte, había leído cosas que me influenciaron Simone de Beauvoir, textos feministas. Héctor ya se inclinaba por la ecología. Ya teníamos una formación personal que se reflejaba en lo que creíamos y en la música.
Eso hace sentido. Todos los accesorios que usaron en el DVD Reluciente & Rechinante, fueron creados con material reciclado. Las flores, las lámpara, los atuendos, incluso los straps de las guitarras, fueron hechos con tapas y PET. Debe ser muy gratificante poder unir su discurso ecológico con la puesta en escena.
El tener 25 años de carrera tiene sus ventajas, su estructura, su momento de madurez. Las cosas que hacemos ahora son más completas y complejas, a nivel escenográfico, de vestuarios. También a nivel conceptual, porque ahora le hablamos a la gente de diferente manera que cuando comenzamos. Estuvo muy chévere grabar ese DVD, todo fue hecho con cosas recicladas.
Actualmente están de gira, y tienen una fecha muy especial el próximo 1 de noviembre, ¿cómo enfrentarán este show en una noche dedicada a la memoria de José Guadalupe Posada?
Desde que salió la propuesta, he estado en contacto con la directora, quien me contó sobre Posada. También me dijo que era la primera vez que invitaban una banda que no era mexicana. Desde ese momento comenzamos a pensar en armar un altar que fuera un homenaje a México. Era extraño pero a la vez no tanto, porque yo crecí escuchando música ranchera.
En Colombia, es la música con que se lleva serenata. Desde las primeras veces que nosotros viajamos a México, nosotros quedamos deslumbrados con los colores, la simbología y sobre todo con la celebración de muertos, porque en Colombia no hay.
Lo que haremos es tocar tres canciones mexicanas dentro del repertorio: va a estar “Ojalá que te vaya bonito” de José Alfredo Jiménez, es un tema para un homenaje que hicimos hace un tiempo. También “Vine a pedirte perdón” de Juan Gabriel, en un homenaje que hicimos con Sony México, para el disco de Amor Eterno al Divo; también haremos “Mátenme porque me muero” de Caifanes, a quienes escuchábamos hartísimo desde antes de tener la banda. Ya luego fuimos teloneros de ellos cuando estuvieron de gira por Colombia.
Eso a nivel musical. Además haremos algo con un colectivo que hace video. Irá muy ligado al trabajo de Posada. Al inicio del show habrá un vocero gritando noticias, como en los tiempos de Posada. Además habrá un altar comunitario para las víctimas del terremoto de México y el huracán en el Caribe. Todo eso lo hemos construido poco a poco con los orgnizadores, quienes hace poco viajaron a un show nuestro en San Francisco, para mostrarnos los avances del video. Está quedando increíble. Estamos muy contentos porque saldrá bien bonito.
Hace rato vi el video de la versión que hicieron de “Vine a pedirte perdón” de Juan Gabriel, soy muy chismoso y me puse a leer los comentarios de la gente. Uno me llamó la atención. Cito textual: “eres la última y auténtica rockstar latina. Las demás son cantantes; Andrea es una verdadera rockstar; imponente; majestuosa; poderosa; talentosísima”. ¿Qué te provoca leer este tipo de percepciones de la gente?
A mí me asusta leer lo que ponen. Cuando ponen algo malo me puede mucho, soy débil. Pero cuando escriben algo bonito… ¡ayuda! Esta carrera es difícil, competido. Tener 25 años de carrera es chévere, pero no siempre. Está uno compitiendo con chicas re jóvenes, re-bonitas. Es difícil hacerse viejo. Cuando alguien comenta algo así ayuda, es muy chévere.
Este años se cumplen 21 de cuando grabaste la versión más chingona que hay de “La ciudad de la furia” con Soda Stereo. El tema no pierde vigencia, suena acutal y no puedo pensar en bandas que hagan algo a ese nivel actualmente. ¿Qué fue para ti que un maestro como Gustavo te invitara a cantar en el desenchufado eléctrico?
Sentí de todo: nervios, emoción. Yo creo que por eso la canción le gustó a tanta gente. Si te fijas, está llena de errores técnicos. Pero yo soy buena para comunicar sentimientos, estaba muy emocionada. Absolutamente enamorada de ese hombre tan absolutamente talentoso, tan guapo. Estaba en la cima de la felicidad. Eso recuerdo.
Nosotro estuvimos de gira con Soda y yo lo vi en todos lados, en camerinos, en pruebas de sonido y en concierto. Era alguien serio y exigente, te imponía mucho. En cambio, conmigo era súper dulce y lindo en todo el proceso. Me escribió la letra a mano, con papel y plumón. Cuando salió el tema, tuvo tanto éxito que nos abrió más puertas. En todos lados nos invitaban para tocar con Soda.
Fue harto lo que compartimos con ellos, mucho lo que se aprendió de semejantes maestros. Aún sigue abriendo puertas esa canción. Hasta la fecha me tomo fotos con la gente por esa canción, todo mundo la recuerda. Me siento súper afortunada de haber tenido esa oportunidad.
