El Individuo es uno de los raperos más celebrados de la escena del hip hop alternativo de Cuba. imagínense una combinación de la teatralidad de Calle 13, el atletismo de Snow Da Product y la visión avant garde de Kendrick Lamar. Ahora desde un destello de jazz y hip hop, estrena su nuevo EP titulado “El Proceso”, el cual es parte fundamental en el crecimiento musical, sin duda un recordatorio constante para avanzar. “El Proceso”, explora los desafíos del proceso creativo y migratorio a través de 8 canciones poderosas y emotivas. Platicamos en exclusiva con el rapero, quien promociona el sencillo “La mecánica”.
¿Cuál es la búsqueda detrás de tus canciones?
A mi la música, sobre todo el rap, siempre me ayudó muchísimo, emocionalmente hablando, no sé como explicarlo, pero tengo entre mis recuerdos canciones específicas, que me levantaron en momentos en los que estaba súper down, siempre he soñado con devolver eso y esa es la razón principal por la que hago música, para ayudar, para contar historias, para dar mensajes positivos, que puedan servir de algo a quienes me escuchen.
¿Cuáles son tus referencias de rap cubano, o de dónde vienen tus influencias?
Mis referencias primeramente vienen del rap cubano, grupos como Obsesión, Doble Filo, Explosión Suprema, Randy Acosta y Los Aldeanos. Soy una mezcla entre el rap de los 90 de mi país y el de la actualidad, creo que eso fue lo que me permitió crearme un sello propio. Aunque consumo mucho rap estadounidense también, artistas como J Cole, Kendrick Lamar, Lute, Earthgang, entre otros.
¿El no usar samplers y recurrir a la música en vivo es parte de tu sello?
Sí, aunque no obvio la opción de usarlos, pero me gusta crear desde cero, con el sueño de que como mismo usamos melodías de otros artistas para samplear, en algún momento puedan ser sampleadas también las melodías de mi música.
¿El nombre del proyecto, El individuo, es una declaración de principios de identidad, de individualidad?
El nombre es, porque narro experiencias e historias reales, que pueden ser experiencias e historias de cualquier individuo, con las que se puede identificar cualquier persona, yo soy uno más, solo que escogí la tarea de convertirlas en música.
Lei que ahora, es un 50% beat y un 50% discurso lo que estás buscando, ¿qué mensaje crees que es importante transmitir?
Creo que la mejor manera de hacer llegar mi mensaje al público es preocupándome porque la musica tenga una calidad que corresponda con lo que estoy diciendo, en el rap cubano, desde mi opinión, pasaba mucho que los artistas decían que lo importante era el mensaje, y se preocupaban solo por eso, no importaba si el beat se escuchaba bien o mal, yo pienso que debe haber un 50/50 y así el mensaje se expande más, porque quien no llega a tu música por el discurso puede llegar porque le gustó una melodía determinada o como suena en general tu trabajo, y así de paso, escucha también lo que estás diciendo, por eso a la hora de crear priorizo siempre ambas cosas.
La fusión de hip hop con jazz si bien no es algo nuevo, no es muy común en el rap latino, ¿qué te motivó a experimentar por ese camino?
Lo que pasó en el caso mío es que las primeras personas con las que colaboré fuera de la escena del rap fue con jazzistas, cubanos, lo que despertó mi interés por conocer más sobre ese mundo y poco a poco sin darme cuenta eso fue cambiando mi sonoridad y la manera de ver mi música. Sin querer fui incluyendo esa visión en lo que hago, además de que los músicos con los que trabajaba también venían de ese mundo, entonces se volvió inevitable.
Supe que enfrentaste un problema de depresión tras dejar Cuba y vivir en USA, ¿a qué se debió?
Es fácil de explicar, yo soy muy cubano, muy, amo mi tierra, sus costumbres y todo lo que soy cuando estoy en Cuba. La verdad es que eso no lo he encontrado en más ningún lugar del mundo, el hecho de estar fuera de mi país, de no encontrarme en donde vivo y a la vez saber que era necesario hacerlo, me golpeó muchísimo mentalmente. Fue un proceso empezar a concientizarlo. Mi mente estaba viajando por lugares muy oscuros, no veía nada positivo en mi vida, me afectó en todos los sentidos.
En El Proceso se habla de soledad y de la vida en general, de un viaje, ¿en ese sentido la canción es terapéutica?
Para mí sí, completamente, es lo que me encanta de hacer música, me ayuda muchísimo a conectar conmigo mismo, a liberarme de cosas con las que no puedo seguir cargando solo, el hecho de compartirlas me quita siempre un poco de peso de encima y así mismo me gustaría que le llegara al oyente, cuando sucede, siento una paz incomparable, y esto precisamente es esta canción, la conversación que nunca he tenido ni siquiera con mis amigos más cercanos, de todas las cosas por las que he pasado y he sentido desde que salí de Cuba. Personalmente si la siento como una terapia.
¿Cual ha sido la respuesta de tu música en Cuba y en latinoamérica en general?
En ambos lugares ha sido siempre muy positiva, a pesar de que no soy un artista súper popular he tenido la suerte de contar con el respeto de muchos de los artistas más conocidos, tanto de Cuba como de América Latina y poco a poco he ido creando un público fiel que sigue y apoya mi trabajo de manera orgánica.
¿Existe el mismo tipo de censura en Cuba actualmente o las redes sociales han cambiado eso?
Todavía existe, aunque las redes sociales han jugado su papel para cambiar un poco esa situación, el hecho de tener nuestros propios medios para promocionarnos, para hablarle a nuestro público y para hacer nuestro trabajo, hace que le sea un poco más difícil al estado controlar que pueden escuchar la gente y que no, pero eso sucede solo en el mundo digital, porque a la hora de hacer un concierto en vivo o algo más grande, de alguna manera dependes de que el gobierno te dé o no el permiso para lograrlo.
¿Qué tipo de contenidos te gustan en cuanto a cine, literatura, noticias, o en general, entretenimiento, que influya en tus letras?
Me encanta leer, aunque no soy un súper conocedor de literatura, leo por instinto, los libros que me llaman la atención. Siempre trato de consumir contenidos que me nutran, es una de las maneras que tengo de buscar inspiración para escribir. Trato también de estar actualizado en cuanto a las noticias, pero mayormente a través de medios oficiales, para no caer en la manipulación, aunque estoy claro que los medios oficiales también manipulan a veces. Es bien importante para mí estar siempre actualizado con lo que está sucediendo en el mundo.
he leído que concibes la música de forma espiritual, ¿como es eso?
Si, completamente, la música que hago, y que escucho para el disfrute, tiene que hablarle al alma, si no es así pierdo rápido el interés. No me llaman la atención las obras vacías, aunque escucho de todo aveces para estudiar un poco. Pero si, me encanta la musica que tenga vida propia, que cree emociones, que cambie vidas y a su vez es lo que trato de hacer con la mía.
¿Cuales son tus planes discográficos y proximos proyectos?
Acabo de lanzar un álbum que se titula “El Proceso” y creo que en algún momento este disco tiene que tener una segunda parte, no es nada seguro todavía, pero tengo esa idea. Además de que tengo algunas colaboraciones con artistas a los que admiro muchísimo, que están en proceso de elaboración y no pudieron salir en este proyecto, pero vienen en camino. Se está trabajando también en función de hacer una gira de conciertos por varios de los países donde más se consume mi música, y quedan también algunos lanzamientos de audiovisuales pendientes que tienen que ver con este álbum (El Proceso) y que irán saliendo poco a poco.