El mismísimo Sergio Arau estará presentándose este jueves 14 de septiembre en un show muy especial en el que presentará en vivo su concepto Tocada y Fuga. La cita es en The Paramount en L.A. y sobre ello, platicamos con el ex Botellita de Jeréz (entra tantas otras bandas) en exclusiva para La Banda Elástica.
¿El rock sigue siendo duro o se ha vuelto más conservador con el tiempo?
Siempre han existido las dos partes, un rock muy suavecito y muy fresa desde los años 60, desde Los Teen Tops. Es que el rock abarca un rango brutal, desde cosas muy ligeras y muy pop hasta el punk, porque el punk sigue, el slam sigue.
Entonces el rock sigue siendo disruptivo…
Es la nueva música clásica, hace unos años decían “es que el rock ya pasó”, y güey, ¿entonces cómo se llenan todos los Vive Latino? Ahí sigue, siguen los conciertos. Lo que sí, es que el rock es el lenguaje más crítico, aunque a veces sea fresa. El rock te permite dialogar, puedes hablar de lo que sea.
¿Cómo comenzó este proyecto de música clásica y rock?
La verdad es que este proyecto es viejo, del 2000, pero lo fui posponiendo, hice la película Un día sin mexicanos, volví con Botellita de Jeréz, hice muchas cosas y lo fui posponiendo hasta que, en medio de la cuarentena, comencé a armarlo. Mi esposa (Yareli Arizmendi) me apoyó con este proyecto de la música clásica. Le entró Germán Briseño, que es ingeniero de closet.. porque tiene un pequeño estudio en su closet. Es un gran músico y grabamos con toda calma.
¿Cómo ha recibido el público este concepto?
Es un proyecto complejo, la gente se imagina que traigo una orquesta, como el Metallica sinfónico, pero no es así, la idea es hacer canciones inspiradas en la música clásica; la verdad es que esas melodías clásicas son geniales, bien gruesas, agarras cualquier melodía y te llegan bien profundas… melodías que hasta sueñas. Me puse a jugar con los títulos, por ejemplo, Lago de los Cisnes, y la convertí en “Lago de los bisnes”, que al final se convierte en reggaetón, cosa que me gusta mucho porque sé que a Tchaikovsky le encantaba el perreo.
¿Qué opinarían Mozart o Tchaikovsky de escuchar tus conciertos?
Les encantaría, ellos tenían una mentalidad del futuro, una mente universal. Quizás con la versión de Bach que se convirtió en una cumbia sí les molestaría.
¿Y cómo se dieron las colaboraciones?
Son puros amigos, José Fors, Camilo Lara, Piro, Lino Nava, Rubén Albarrán. Gracias al zoom, logramos hacerlo, ir dando indicaciones y estuvo chido.
¿Qué esperaríamos del show en L.A. en septiembre?
En los 90 viví acá, incluso tuve un grupo que se formó en la ciudad: Sergio Arau y los Heavy-Mex, eran un grupo de metal que ya existía y los jalé. Ahora todo se hizo con el músico Germán Briseño. También estuvo un músico argentino residente en L.A que se llama Ruy Folgera, es muy bueno, él participó en varios de los arreglos, momentos que requerían más orquesta.
¿Qué otros proyectos tienes en mente?
Tengo un proyecto, una exposición de autorretratos, aunque tengo que confesar que el modelo me cae gordo. Además quiero poner un antro que se llame 40 y más, donde puedan entrar sólo mayores de 40 o quizás menores, pero acompañados de un adulto mayor, ja, ja, ja.
Veo que defiendes los nuevos libros de textos mexicanos, que han causado mucha polémica en ciertos sectores…
Sí, claro, es que se volvió una cosa política. Cada vez que se hace un break del sistema, o cada vez que salga una aplicación nueva, es normal que haya errores. La verdad es que yo hice muchos de los dibujos de la versión de los 80, entre 83 y 85, en los libros: la ratita planchadora, los tres tristes tigres, hice cientos. Ahora, un periodista del diario Zeta de Tijuana protestó de que Octavio Paz no estaba en los libros de cuarto.
Se han puesto buenos los debates
En La Mañanera el presidente dijo en una discusión, que el rollo entre la alta cultura y la baja cultura era un tema clasista. Me pareció buena respuesta. Alegan que Paz era Nobel y espero ganar algún día el Premio TVyNobel-a.
¿Has hecho stand-up comedy?
Vengo de una familia de humor, Botellita era mucho humor callejero, por eso “Alármala de tos”, por eso ese humor. Es lo naco, lo defendimos, naco es chido es un término que inventamos nosotros para entender y redescubrir lo que somos.
Pero lo naco luego lo quisieron volver cool…
No, naco es cool-lero y naco es chido. El rollo del arte, y eso lo comparto mucho con Yaleri Arizmendi, mi esposa y mi socia, el chiste del arte es hacer visible lo invisible.
No sabía que el comediante Sergio Corona era tu tío, ¿cuál es tu sitcom mexicana favorita?
Me gustaba Hogar, Dulce Hogar, claro, pero prefiero Cachún Cachún RaRa. Este proyecto de Tocada y Fuga, en vivo es un standopera, una especie de rock ópera, pero de comedia, es como juntar a Monty Python, una cosa rarísima. Hay una cosa que nadie sabe, pero este 14 de septiembre cumpliré 344 años; cuando Dios estaba poniendo la fecha de caducidad a los bebés, se distrajo y no me la puso. Mi nombre real es Laslo de la Vega Morris Balam Claus Viteli y Pavón.
¿Qué te puede molestar de la escena musical actual?
Me sacan de onda las redes de streaming, ¿sabes cuántos nos pagan a los músicos por sonar en plataformas? 4 centésimas de centavo, y entonces ya no hay discos, ya no hay CDs, no hay casetes, ¿de qué viven los músicos? Hay millones de canciones en Spotify de gente que sube su canción y nunca ha tocado en vivo.
¿El que no haya filtros ha afectado la creatividad?
Estoy en contra y punto, la gente que te oye en internet es una ilusión; yo me negué a subir el disco, pero finalmente lo hice; soy un artista independiente a final de cuentas, independiente… del buen gusto, de las ganancias.
Pero tú tienes muchos fans gracias a tu trayectoria…
Mira, cuando voy en CDMX sí me paran para las fotos y doy autógrafos, sí me siento muy querido, pero la verdad, es que cuando toco no van a verme, quizás por que estoy viejo. Pero para este show de L.A. será otra cosa; la verdad es que traemos un show muy teatral y muy divertido, muy visual y muy sorprendente.