El fin de semana pasado, Fher Olvera, cantante de Maná, dio de qué hablar tras irse con todo en contra del reggatonero puertorriqueño Bad Bunny. Fue durante un show que la agrupación tapatía dio en su natal Guadalajara, que el vocalista sorprendió al público con sus palabras. El cantante calificó al género urbano omo “poca cosa” y lo contrastó con el trabajo realizado por Maná. Además, se refirió a Bad Bunny como “Bugs Bunny”, desatando principalmente risas entre el público asistente. En el video, Fher externa que el reguetón era “una mamada”:
“Aquí no es como el pinche reguetón que es una mamada. Aquí sí se hacen letras, que el pinche Bugs Bunny no mame, cabrón”, fueron sus palabras exactas, captadas en un video que puedes ver aquí.
Cabe mencionar que esta no es la primera vez en la que Fher Olvera manifiesta su rechazo hacia ese estilo musical, ya que hace poco declaró que nunca colaboraría con El conejo malo. En esa misma entrevista, aseguró que los reggatoneros tenían pocos recursos literarios y violentaban a las mujeres.”El que si de plano no lo puedo escuchar mucho es al Bad Bunny de veras lo respeto, él se ha hecho muy famoso. Ha llegado a lugares donde nadie ha llegado de los latinos y eso tiene un mérito. Pero, no por eso te va a tener que gustar ¿verdad?” comentó en una entrevista para RS.
Artistas como Julieta Venegas o Rubén Albarrán de Café Tacvba han hecho todo lo contrario y han colaborado con el boricua. Hace poco, Maná también se enemistó con Nicky Jam, al retirar su colaboración con el músico, tras enterarse de que éste había apoyado a Trump.
El grupo mexicano de post-punk industrial Mengers, en una entrevista con LBE, también habló (no muy bien) de Band Bunny.
Otro artista de rock (o pop) mexicano que recientemente causó polémica, fue Luis Humberto Navejas, quien al grito de: “quiten esa pinch… música horrible, por favor, ya estuvo de esa mierda”, pidió que quitaran la música de banda y corridos que sonaba en las bocinas previo a su show con Enjambre. ¿Intolerancia o libertad de opinión?
