Con una precocidad inusitada, Sandrushka Petrova creció escuchando bandas como Primus, Mr. Bungle y Sonic Youth. Influenciada por los maestros del noise y la disonancia, al poco tiempo aterrizó una banda de comportamiento musical bipolar y esquizoide.
Con shows delirantes y energéticos, el ánimo punk del grupo no tardó en consolidar un fan base en el underground mexicano, además de llamar la atención del productor Jerry Rosado de Intolerancia, quien desde entonces ha sabido traducir las obsesiones sonoras y compositivas de la banda.
Con un L.P. debut titulado Paper Dolls, la banda llamó la atención de la prensa especializada, que no sabía cómo clasificar a un grupo tan ecléctico: la promiscuidad musical lo avala como una propuesta de avanzada que elude cualquier clasificación simplista de su música.
Después de varios cambios de alineación, Descartes a Kant lanza From Il Visore Lunatique, un álbum atípico en la escena mexicana inspirado en la escritora Victoria Dickens. A lo largo de 10 tracks, se abordan diversos trastornos psicológicos, trazando una suerte de thriller musical psicológico.
Con 15 años de trayectoria, Descartes a Kant es hoy un grupo de exportación que ha viajado por E.U., Sudamérica y Europa, desafiando a audiencias de todo tipo con su propuesta inusual, plena en experimentación y energía, con habilidad de sobra para compaginar melodías dulces e impronta cheerleader, entre armonías disonantes y ritmos de filiación progresiva.
En directo, su atuendo nunca resulta fortuito: responde a un performance del que Tarantino se sentiría orgulloso. Pocas bandas han sido teloneras de sus héroes. En ese sentido, ellos han abierto shows de Yeah Yeah Yeahs, Sonic Youth, The Melvins, Cansei de Ser Sexy, Slayer, The Horrors y Stereo Total.
A finales de 2015 preparan un disco tributo a Lou Reed, una de sus máximas influencias.