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Bajofondo: Del tango a la milonga, pasando por la energía poderosa del rock, así es “Presente”, lo nuevo del combo argentino

Poco más de 10 años tuvieron que pasar para consolidar su identidad musical a través de un relato sonoro de la vida contemporánea, su cotidianeidad, con sus altibajos, argumento auditivo de Presente, nuevo disco de Bajofondo, agrupación encabezada por el destacado productor, músico y compositor argentino Gustavo Santaolalla, ganador de dos Oscar por la música de las cintas Brokeback Mountain y Babel.

Presente es un álbum que contiene 21 temas, salió a la venta a nivel mundial el pasado martes 5 de marzo (2013), a través de Sony Masterworks, después del paso de la banda por Universal.

Del tango a la milonga, pasando por la energía poderosa del rock, la delicadeza sonora de los arreglos sinfónicos, los palpitantes ritmos de jazz y los galopantes beats de la música electrónica, Bajofondo se cobija en su raíz folclórica argentino-uruguaya para ofrecer un disco sabroso, ecléctico y ultracontemporáneo.

Conversamos esta semana con Gustavo Santaolalla, para que nos diera los pormenores de este nuevo lanzamiento y nos pusiera al corriente de sus múltiples proyectos. Arrancamos!


Bajofondo regresa y se hace “presente” con Presente, ¿llega en el momento justo?


En realidad pasaron cinco años desde Mar Dulce (2007), ahora, Presente es un álbum muy especial, muy significativo para nuestra carrera, cumplimos 10 años de estar juntos, la misma banda, lo que empezó como un proyecto de laboratorio: Bajofondo Tango Club, iniciado por un servidor, invitando amigos y colegas a tocar, ha tenido tanta repercusión que la gente quiere escuchar esta música en vivo.

La música empezó a mutar, empezó a cambiar, nos convertimos en una banda, ese proceso lo capturamos en nuestro disco anterior. Aunque pasaron más de cinco años desde nuestra última reunión en el estudio, en realidad el disco es una especie álbum doble, toda esta música la venimos trabajando desde hace más de dos años, dos años y medio, yo siento que era el momento de sacar este disco, no creo que lo pudiésemos haber hecho antes.


Como el exitoso productor que eres ¿cómo compaginar todas las experiencias musicales de los integrantes del grupo sin caer en la tentación de marcar el rumbo de la grabación?


Yo disfruto muchísimo, y creo que eso ha pasado mucho a partir de estar produciendo a tantos artistas tan diversos, disfruto mucho la colaboración creativa, te diría que, como sabes, tengo mis proyectos solistas, de hecho, antes de fin de año saldrá un álbum que es un poco la continuidad de Ronroco (1998).

Disfruto más haciendo lo de Bajofondo, compartiendo la creación musical con otra gente que haciendo lo mío solo, son dos experiencias distintas pero me encanta eso, me encanta ser parte de un grupo, de un equipo, cada uno, por supuesto, tiene un rol, que es una cosa entre nosotros, es como un equipo de futbol.


El disco tiene una frescura que viene a consolidar su sonido, como banda, pero ¿cuál ha sido la estrategia para sacudirse la etiqueta de “tango fusión” con la que muchos los han etiquetado?


Presente es para nosotros un disco tan trascendente, era muy importante que este álbum fuera un poco como nuestro manifiesto artístico, de alguna manera fue una declaración de principios, de nuestra estética, de nuestra identidad, de lo que venimos experimentando, el sonido y las cosas que hemos ido logrando.

Tuvimos diversos parámetros en cuenta para abordar el trabajo. Una de las cosas que para nosotros era muy importante era que el disco fuera hecho solamente por la banda, queríamos reafirmar nuestro concepto de grupo, lo del colectivo funcionaba muy bien en el sentido de que éramos un montón de gente con talento, pero también había otro montón de gente que participaban con nosotros, con los años, nos hemos consolidado como una banda y queríamos que eso se demostrara en este disco, por lo tanto, fue una decisión totalmente pensada, la de que el disco fuera hecho totalmente por Bajofondo, donde todos tomáramos la tareas que había que hacer, desde tocar hasta cantar.

Como decimos los argentinos, es la música grosa, de los artistas grosos, que realmente no se pueden definir con etiquetas, siempre pongo el siguiente ejemplo: si vos vas a encasillar un tango electrónico, es una reducción mental bastante pobre, nosotros no hacemos ni tango ni música electrónica, es una mezcla de cosas donde ambos géneros son un componente, hay murga, hay candombe, hay funk, surf, mucho rock, si ves tocar a la banda en vivo es una banda de rock, con una poderosa energía que se mueve, también hay música clásica, progresiva, siempre pienso en Björk, si se tuviera que definir la música que hace ¿es folclore islandés-electrónico-rock? La música que hace Björk es música de Björk, punto.

Hemos trabajando tanto en lograr mezclar tantas cosas y llevarlo a una cosa orgánica, que creo que la música de Bajofondo sólo se puede definir como música de Bajofondo, si te vas de un track a otro escuchas las diferencia y sin embargo, hay una conexión, una coherencia aunque abarcamos estilos muy diferentes.

Bajofondo | Recital filmado el 11 diciembre de 2005. realizado en la Costanera de Buenos Aires, Argentina en el Día Mundial del Tango.


Si bien su herencia folclórica era su punta de lanza en un inicio, el nuevo álbum suena diverso, pero a la vez, cuenta con ciertas sonoridades que juegan como una suerte de hilo conductor de una historia que enlaza las historias de cada uno de los tracks.


Queríamos que el álbum fuera conceptual, a diferencia de Mar Dulce y Tango Club, que son discos que adoramos pero que eran más una colección de temas, tanto instrumentales como cantados. En Presente queríamos que hubiera un concepto, en el sentido de no tener necesariamente una línea argumental o una historia, más bien es como un viaje, una travesía que te va llevando por distintos lugares y te va mostrando distintas estampas o paisajes emocionales, geográficos, musicales-visuales, siempre nuestra música lo ha sido, teníamos toda la intención de hacer un disco muy visual y creo que lo hemos logrado.

Inspirados en estos grandes álbumes conceptuales de la historia, que tanto nos han marcado a todos nosotros, como Pet Sounds, de los Beach Boys; el álbum blanco y el Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band de los Beatles,, todos esos discos que, de alguna manera, sin tener una historia, tenían un concepto, pensamos también en la utilización de la orquesta. Todos esos discos tienen un gran apoyo orquestal, si bien en nuestro trabajo anterior habíamos utilizado cuerdas; también eso viene y se engancha con la tradición de las orquesta de tango, en este caso quisimos ampliar eso y es una sección de cuerdas más grande, aparte también tenemos bronces (alientos), maderas, percusiones, arpa, hasta theremín tenemos en el disco, contamos con instrumentos que soportan y acompañan a la banda para crear este sonido poderoso y también muy cinematográfico.

Sentimos, como banda, que es un momento de maduración de lo que venimos experimentando, pensamos también que en el presente nuestro coexisten memorias del pasado y cosas que te lo evocan, como el sample de algún tango, alguna milonga o de algún candombe, también está presente una visión futurista, en el álbum coexiste el pasado y el futuro, y el presente también porque es como un regalo, un regalo que nos hicimos a nosotros mismos, como banda, el decir “bueno, vamos hacer un disco con nosotros, solos”, un presente que también esperamos le llegue a la gente.


El sonido de Bajofondo de ha vuelto más orgánico, más completo, y Presente da la impresión de ser una especie de soundtrack de una vida urbana, con sus altibajos, su cotidianeidad, una suerte de relato sonoro de una vida contemporánea. Sin dejarla de lado, esa melancolía sonora del tango sigue presente.


Subyace como un día en la vida de una persona, un día, una semana, por el Río de la Plata, en Buenos Aires, en Montevideo, empieza con una cosa totalmente introspectiva, casi también como el mundo de los sueños, cuando estás por ser abrazado por Morfeo, y de pronto, apareces en medio de la urbe, con Código de barras, te van a pasar un montón de cosas, a veces también como cuando haces las cosas y luego reflexionas sobre ellas, los temas se enganchan uno al otro, a nivel lírico, poético, por ejemplo, Pena en mi corazón, tiene que ver con el hecho de estar desplazado, estar ubicado en un lugar que no es el tuyo, muchos de nosotros, a mí por ejemplo, que llevaba tanto tiempo de vivir en Los Ángeles sin viajar, hoy en día, viajo muchísimo a mi tierra y ya casi no siento eso, pero cuando vine por primera vez, pasaban años de que no salía de acá. Esa canción tiene que ver un poco con eso, y también lo que pasa con las personas, “pena en mi corazón, si estoy con vos y pena en mi corazón, si no te tengo”.

Después, va Cuesta arriba, en la vida también es un juego, como en el tango existe el cuesta abajo, es mucho más tanguero, muchos más down, en cambio, nuestra música es más para arriba, es más rockera, en esta canción, igual, implican el esfuerzo que tienes que hacer en la vida, ya que no es plana, tira para arriba y para abajo, y bueno, lo mejor es estar bien ante las vicisitudes, estando cuesta arriba.

Por su parte, Lluvia, es un tema que habla un poco del hacinamiento y de la monotonía, de la presión que pueden haber en las grandes urbes, las grandes ciudades como Buenos Aires, el Distrito Federal o Nueva York, ciudades donde, de pronto, la lluvia, a nivel metafórico, puede ser un elemento de redención, una cosa que viene y te limpia, te lava, te saca todo ese peso y todas esas cosa que uno carga y que la ciudad te potencia.

Y después de eso viene Circular, para recordar que la vida es ciclo que se produce y se lleva a cabo en un círculo, el disco de alguna forma es circular, por eso empieza y termina más o menos de la misma manera.

Después viene el pre-final, porque para mí hay como un final del disco y un bis, después está el epílogo, el final, Así es Propergol, esa canción habla de la posibilidad de continuar, de cómo podemos continuar, perpetuarnos, a través de un hijo, a través de un disco que escribimos, a través de una canción, pero también cómo podemos continuar yendo a otro planeta, para empezar de nuevo otra vida.

Y finalmente, termina con el viaje con el Outro, que es donde viene la cancha de futbol, volvemos otra vez a la Tierra, representada en la cancha, hay que salir a jugarle a la vida.

Y concluye con ese cántico de cancha, como reivindicando a la banda, de una manera muy popular, más terrenal.


El primer disco de Bajofondo salió hace 10 años, cuando la industria de la música estaba en una crisis que la ha transformado completamente, siendo parte fundamental de la misma, en este contexto ¿cuál consideras que es el reto actual para la banda?


Para nosotros ha sido un cambio muy importante en este momento en nuestra carrera, el haber pasado, después de muchos años de relación con Universal y Surco, que fue un proyecto tan exitoso, donde salieron tantos artistas y se produjeron tantas cosas.

Lo que ha pasado en la industria, fue cerrar montones de compañías, Surco, en alguna medida, también cayó en eso, y ocurrieron dos cosas: paralelamente a lo que estaba pasando con la industria, después de producir 100 álbumes, cuando Bajofondo, que en realidad era otro proyecto dentro de Surco, empezó a cobrar vida propia, de pronto me encontré en un escenario, cuando hacía 20 años que no me subía a uno para tocar, en alguna ocasión subí como invitado de alguien, pero el subirme a tocar la música donde yo estoy involucrado al cien por ciento, con una banda, de manera periódica, hacía 20 años que no lo hacía.

Coincidió con lo que comenzaba a pasar con la música de las películas, fue una cosa que ocurrió de manera no sé si decirla, mágica, no fue una cosa pensada, no tuvo ninguna logística, no dije “ahora me voy a dedicar hacer música para películas”, todo ocurrió accidentalmente a partir de un disco que se llama Ronroco.

Todo eso sucedió simultáneamente. Por un lado, me di cuenta que las fuentes que tenía para poder producir los discos y para hacer la música que siempre me gustó, la alternativa, se me estaban terminando, debo decir que si bien me encanta, adoro producir, pues he tenido el honor y el lujo de trabajar con artistas como Café Tacvba, nuevamente (El objeto antes llamado disco, 2012), en este momento no estoy tan interesado en producir a otros artistas. Estoy mucho más interesado en desarrollar lo de Bajofondo, mis proyectos, meterme en otras aventuras, como Arrabal, un musical de danza que he hecho con la música de Bajofondo, el cual estamos montando en Toronto (Canadá) este año, para estrenar en enero de 2014.

Me interesa ahora la posibilidad de escribir un musical con Guillermo del Toro sobre El Laberinto del Fauno, y en medio de esto, cambiamos de sello discográfico, nos hemos quedado con toda la parte editorial con Universal, mientras que la parte discográfica esta en Masterworks, que es una edición de Sony Music, y, por primera vez tenemos un contrato internacional, precisamente porque de Surco, que era un sello latino, estábamos un poco circunscriptos al mundo más latino que hispano.

Hoy en día, Presente está saliendo en Alemania, Inglaterra, Japón, Estados Unidos, en otros mercados, y con una difusión desde el ángulo que proyectan los productos en esos mercados, y claro, a través de Sony Latin para todo Latinoamérica y España también.

Cuando estábamos haciendo el álbum en Buenos Aires, grabando la orquesta, de más de 30 personas, decíamos “estos discos no se hacen más”, realmente nos sentimos en una situación privilegiada, sabiendo cómo está la industria en la actualidad.


La vitalidad de Presente te ha contagiado al grado de dirigir el video de Pide piso, el sencillo del álbum ¿cómo surgió la idea de hacer un videoclip con una técnica de animación 2D que nos recuerda los inicios de los videojuegos?


Yo había codirigido varios videos sin nunca tener los créditos, pero en este caso, me interesé por, además de dirigir, crear todo el concepto del video, claro, con ayuda de animadores.

Una de las cosas que tiene Bajofondo es que contamos con un espectro muy amplio de gente que nos sigue, desde los más jóvenes hasta los más grandes, es un video que lo ve mi hijo y lo ve mi madre y también le encanta. Algo fresco, distinto, esa era la idea, inesperado.

Porque no esperas encontrarte en la red un video así, donde lo mismo ves bailando a Michael Jackson como a PSY.


Después de Bajofondo ¿qué sigue para Gustavo Santaolalla?


Acabo de terminar la música para un videojuego llamado The Last For Us, para Sony Playstation, el cual saldrá en el mes de en junio en los Estados Unidos, acompañado de un álbum que es el soundtrack del juego.

Además, estoy por terminar mi álbum continuación de Ronroco, cuyo nombre es Caminos, que será editado a finales este año, el disco abarca el trabajo de poco más de 10 años de composiciones que vengo haciendo.

Y por último, trabajo en una película de animación que producirá Guillermo del Toro, cuya temática ocurre alrededor del Día de los Muertos, aun no tiene título definitivo.

Bajofondo | Así se hizo Presente

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