Llegué a la música de Sonoras Mil a través de la recomendación de mi buen amigo, el periodista musical colombiano Jaime Monsalve. Desde una primera escucha de su álbum debut, producido en 2015, me gustó la fuerza y espontaneidad de un sonido que recoge de la tradición y recurre a acentos del gran abanico musical del planeta, pero que no puede negar que se inspira en parte en la filosofía do it yourself que marcó a la generación punk. En fecha reciente, Sonoras Mil ha dado a conocer Agüeros, un segundo álbum que da continuidad a la búsqueda del proyecto que encabeza Felipe Gómez Ossa desde Bogotá. Es él quien nos habla de las coordenadas artísticas de su experimento y de sus planes inmediatos.
¿Cómo surge Sonoras Mil?
En el 2014, cuando lanzamos el primer disco. Ahí surgió básicamente. Ese disco lo hicimos aquí en Colombia, en Santa Marta. Lo trabajamos en el estudio y ahí surgieron todas esas ideas, experimentando.
¿Sonoras Mil es tu proyecto o una agrupación?
Es un proyecto que yo comencé y en el que soy el compositor y el director. En vivo nos presentamos como una banda. Mi hermano Mauricio es mi colaborador, mi baterista y mi mano derecha. El proyecto es muy ecléctico, hay varias sonoridades.
¿Qué tenías en mente cuando lo concebiste?
El norte cuando inició el proyecto, justamente, fue tener algo muy variado y ecléctico, sin límites sonoros ni estéticos. Queríamos sentirnos libres al momento de hacer música y experimentar.
Yo soy una persona que escucha diversos tipos de música y de géneros, de diferentes partes del mundo y diferentes épocas así que simplemente dejo que haya una expresión espontánea y consciente, inconsciente, al momento de hacer música y dejo que todo fluya para que no haya límites. Sentirse libres, creo que es lo más importante al momento de hacer música.
Ahora que lo mencionas, ¿qué escuchas? Dame tres referentes importantes de su sonido.
Toda la música colombiana de los 50, 60 y 70. Tropicalismo puro y sus expresiones experimentales como la cumbia psicodélica y todos los otros ritmos del territorio que también abarca el Caribe: Cuba, Jamaica y Las Antillas, esto podría ser un bloque. El otro bloque sería la música del medio oriente: Turquía, Irán, Irak. Todo eso me llama mucho la atención, sonidos muy embrujantes. Y lo otro sería el punk, cómo hacer canciones con dos acordes y hacerlas con mucha expresividad. Esos serían los tres bloques de influencias musicales.
Entre el primer álbum, Sonoras Mil, y Aguero, el más reciente ¿Qué distancia ves?
Creo que ha habido una maduración en el sonido, quizá se ha consolidado ese eclecticismo y esa experimentación con diferentes estilos musicales y sonoridades de diferentes épocas. Es un sonido más consolidado, incluso hasta más libre. Ahora sí queremos hacer lo que nos dé la gana, pero siempre manteniendo una estructura punk.
¿Qué nos puedes contar en particular del tema “Cizaña Piraña”?
Es una mezcla rara de sonidos porque tiene una guitarra eléctrica distorsionada, pero como su línea musical es como un merengue dominicano y va con un coro muy fiestero, muy de fiestas de pueblo de Colombia. Entonces eso lo hace un poquito embrujador, como meterle misticismo del pensamiento mágico de los humanos, que es como imaginar cosas, como al diablo, a dios y las brujas y los hechiceros, así que quisimos emular y tratar de plasmarlos en sonidos.
¿Qué puedes decirme de “Todxs somos Raskolnikov”?
Para todos los que hayan tenido el placer de leer ese gran libro de la literatura universal, crimen y castigo, era como rendirle un homenaje. Musicalmente, las canciones en Sonoras Mil se van elaborando poco a poco, van naciendo y desplegando sus alas mientras uno va experimentando, y son ellas quienes nos van guiando.
Empezó de una idea muy primordial de unos temas que yo tenía, pero se fue transformando con unas percusiones un poco más tribales y en un coro súper enérgico que habla precisamente de los diferentes “yo” que hay en los seres humanos.
¿Están trabajando en próximas canciones?
Si, ya estamos trabajando en lo que sería el tercer disco de la banda. Justo ahora estamos en el primer sencillo con mi colaborador y coproductor Joeri, él hizo la coproducción de la mitad del disco anterior. Estamos trabajando en una nueva canción y se quedaron varias por fuera en este disco, entonces es como terminar esos temas y seguir trabajando en nueva música y lanzar un nuevo sencillo para finales de año, esa es la idea, seguir sacando música y no parar.
