Abominablez, es. sin duda, una de las bandas que más nos remiten a una época en la que el glamour y el culto a la personalidad dictaban las reglas del juego. El grupo mexicano regresa con un nuevo sencillo titulado “Vicio Caro”, una canción que nos invita a explorar los lugares oscuros de una relación, bajo los influjos sonoros tanto del post-punk como de la música disco más chic y un poco la nostalgia por la agrupación previa que dio origen a la banda: Six Million Dollar Weirdo. Junto al single y la promesa de un nuevo disco, la banda también presentó un particular video que aborda el tema de los exorcismos, desde un punto de vista lúdico. Ricardo Flores “Abulón” (Vocalista), Tamerlane García (Bajo y Sintetizador), Lauren García (Sintetizador), María Temez “Bo” (Sintetizador) y Rack Guerrero (Guitarra), son los integrantes actuales de la banda.
Sobre el lanzamiento y otros temas, platicamos con Abulón:
¿Cuál es la actualidad de la banda? Sé que vives en Cuernavaca, ¿cómo ensayan?
Yo voy a la CDMX dos veces a la semana para ensayar, lo cual es una pinche chinga, pero lo tengo que hacer así. La cosa es estar movido, así me late. El ser padre recientemente de una niña de tres años, fue una de las razones de la mudanza; las fiestas y el desmadre nunca han sido lo mío. Estoy clavado en el rollo paternal.
¿Y la paternidad te ha cambiado musicalmente hablando, hablas de otras cosas?
No, no, lo que sí es que toda esa onda locuaz que la niña ve, que habla y dice, y las cosas que se imaginan me inspiran, esa combinación de lo que le hemos enseñado con sus fantasías infantiles. Ando clavado en ese rollo fantástico.
¿Estas nuevas canciones de algun modo remiten a tu propio pasado en los diferentes grupos que has tenido?
Estoy regresando al rollo de Six Million Dollar Weirdo, porque apenas falleció el Bona, quien fue integrante clave. Era un buen tipo, aunque tenía un rollo como de club de Tobi, muy de sus amigos, eso deterioró un poco el tema del grupo que teníamos y además, no se llevaba bien con Zette. Lo menciono porque todo el estilo nuevo del disco me regresó a lo que hacía con SMDW, porque se fue este carnal…
Lo nuevo, al menos el single “Vicio Caro” me suena un poco diferente a lo reciente…
Sí, trae toda esa onda que hacíamos con Six Million, muy de pop ochentero, hemos regresado a eso. Todo el disco viene con esa vibra, como un homenaje oculto a la chamba que llegamos a hacer este güey (Bona) y yo. Imagínate, nosotros paramos en pandemia porque yo quería hacer unas cosas como solista. En eso, se enferma Zette, yo no la había visto en dos meses porque ella se escondió, en ese lapso la enfermedad se la acabó.
Y ahora regresan y se llaman Abominablez como un tributo a Zette
Le hicimos un tributo en el Foro Indie Rocks! que se puso hasta la madre, y ahí decidimos que íbamos a retomar la música porque en corto tiempo a otro de nosotros nos podía cargar la chingada y bueno, quisimos aprovechar que estábamos juntos y nos pusimos a hacer canciones nuevas porque sí estuvo cabrón perder a Zetta. Ahorita la consigna es sacar toda la música y todos los proyectos que sean posibles. Además de la música, mi película, de la que ya tengo un tráiler, es un proyecto que ya lleva un rato, y es un homenaje a la ciencia ficción de los años 70.
¿De quién fue la idea del cambio de nombre?
Fue la idea un fan, ni siquiera se nos ocurrió a nosotros, cuando le hicimos el homenaje, un fan nos escribió y dijo que deberíamos cambiarnos la letra “s” por “z” en honor a Zette. Sí tenemos unos fans súper fieles que nos siguen desde Six Million Dollar, muy clavados y muy loquitos.
¿Has conocido tú a alguno de tus héroes musicales?
Soy muy tímido, me cuesta ser socializar, antes nos decían nerds, ahora no sé. Pero siempre he sido muy fan de Los Pegamoides, de Carlos Berlanga, y me llegué a topar varias veces a Alaska en un bar gay que estaba ubicado en Neza, en una esquina cerca de la casa de mis papás, El Espartacus se llamaba y era un clásico alternativo al que llegó a ir Miguel Bosé, la misma Alaska o Verónica Castro. A Alaska la topé ahí, pero no le dije nada ni me acerqué. Al único que le pedí foto fue a Martin Rev de Suicide, que dio un concierto en el foro Bajocircuito de CDMX y en ese evento también estuvo Nick Zedd el director de cine alternativo de Nueva York; con estos gueyes sí me tomé foto porque ya los vi bien puteados y pensé que si no me tomaba foto en ese momento, pues nunca, y sí, al año se murió Nick.
¿Alguno de tus ídolos que te haya decepcionado?
Nadie me ha decepcionado, creo que todo lo que he visto en vivo por gusto me ha latido. Ver a Martin de Suicide estuvo increíble, el tipo pone un sampler en vivo, y luego se pone a gritar como cantaba el otro güey de Suicide y ése es todo su rollo, una canción puede durar 10 minutos, como la “Ghostrider”, hasta eso me gustó.
Nacho Canut me dijo alguna vez que no estaba chido conocer a tus ídolos…
Es que no sé, es como dices, ¿qué les dices? “Tengo una banda y la hice por ti, pero no es tan famosa como la tuya o quizás algún día si lo sea”. Para eso si necesitarías sentarte y platicar un rato con tu héroe, pero está más cabrón.
Pero si sirviera de consuelo, tu ídolo musical también tiene a su propio ídolo musical y así sucesivamente…
Es una cadena. Sí, es como saber quién era el ídolo de Bowie, que era muy fan de Lou Reed y de Iggy Pop y por eso les chupó la sangre, los “vampireó”, y también era fan de Marcel Marceau y también le chingó toda su onda de mimo. Eso está chido, que conozcas a tu ídolo, pero que sea para robarle todos sus secretos.
¿Cuál es tu “Vicio Caro“?
Es el amor, en todas sus expresiones ja, ja. No, son las playeras, los cómics, las películas. Apenas compré un comic español que andaba buscando, que se llama Zona 84. Mi vicio es lo vintage, los teclados que son caros y complicado y si no te pones vivo te los ganan.
¿Casi no eres de controladores y sí más de sintes análogos, cierto?
Casi no uso controladores, pero sí suelo hacer las secuencias con uno. Tengo un Juno, y tengo un Moog uno de esos Rolands y un Yamaha. Para en vivo me llevo dos teclados, no me gusta llevar todo.
Si no, te verías como Nacho Cano que llevaba como siete sintes al mismo tiempo…
Nacho se veía poca madre, yo era muy fan de ese güey y de Jean-Michel Jarré, quien usó todos los formatos de teclado. De hecho me decepcioné mucho ahora que vi a Thomas Dolby en vivo, tocando con un controlador pequeño y una computadora, me puse muy triste de no verlo con todo su equipo.
¿Qué influencias no tan obvias hay en el disco y en el nuevo sencillo? Escucho influencias como de Chic
Soy muy fan de Chic y de todo lo que produjo Nile Rogders, de hecho fui de los que compraron como 5 boletos para su concierto en México, que se canceló por falta de público, no llenó, nadie tenía ni puta idea de quién era Nile. Stevie Wonder tampoco ha venido a México, Wonder sólo vino a un festival en la playa, son artistas que nunca vinieron y ya no vendrán. Y sí, en la canción hay mucho de Chic y mucho de funk con caja de ritmos, muy al estilo de Gino Soccio y un güey que se llama Cerrone, de esos bateristas discotequeros franceses. Las canciones están muy en la onda de Sigue Sigue Sputnik, ese rollo como industrial ochentero en ciernes. Yo no sabía que los había producido Giorgio Moroder, o sea, ¿ese güey que hacía ahí? Igual hay influencia de un grupo que se llamaba Chrisma, a los que hoy les mama la hipsteriza y esa banda a quienes le late el krautrock, que está como de modita. Igual hay mucho Devo, Six Million era muy de esa onda, pero también trae un rollo fresa de pop muy The Killers.
¿Aún compras vinilos?
Un tiempo me puse a comprar un montón de vinilos de disco-music, cosas de una banda que se llamaba Space, una agrupación francesa en la que todos se vestían de astronautas y que la leyenda cuenta que son los “papás” de Daft Punk, pero de fines de los 70.
¿Qué onda con el video? Muy de terror y de posesiones, pero igual con mucho camp…
A mí no me gusta tanto el terror, pero sí me divierte y los chavos que hicieron el video, que son tres directores de cine de la UNAM, se prendieron con la canción y nos propusieron la idea y pues como estaba muy en el rollo retro sci fi, pues quedó bien. Nos inspiramos en el look de Los Pegamoides cuando empezaron con “Horror el hipermercado” y las chavas se vistieron medio a go-go.
Alguna vez alguien me dijo que eras el mejor front-man de México…
Siempre fui fan de Iggy Pop es mi héroe. Eso que dices, son cosas que si te las crees, pues no sé, es bien incómodo. Ya me he metido en muchos problemas por decir lo que pienso arriba y abajo del escenario y pues que bueno que lo piensen así pero me gusta creerme eso, porque si crees todo lo que te dice la gente, esto se convierte como en una chamba y siempre tienes que cumplir con las expectativas.
